Están de moda, pero representan un problema a la hora de estacionar o de circular. Los sistemas de enganches y las defensas de muchos vehículos están prohibidos por una ordenanza que aprobaron ayer los ediles en la sesión del Concejo Deliberante. Quienes no les saquen estos elementos a sus rodados serán sancionados con multas de entre $ 500 y $ 1.000. Pero antes tendrán que ir a buscar sus vehículos al corralón. El proyecto fue presentado hace varios meses por el concejal radical José Luis Avignone. Su insistencia tuvo éxito ayer; los ediles optaron por no discutir demasiado y dar el visto bueno a la mayoría de los proyectos.
La prohibición de estos paragolpes no es nueva. Figura en la Ley Nacional de Tránsito, a la que la capital está adherida. Pero como no se conoce, cada vez más personas colocan defensas para tunear o personalizar los vehículos, especialmente los de gran porte. Según la norma, ningún paragolpes puede exceder la línea de fabricación de la carrocería del vehículo.
Los expertos en Seguridad Vial aseguran que en caso de accidente, no sirve como protección sino que pone en riesgo la vida de los ocupantes del vehículo y la de los peatones. Además, estos elementos se convirtieron en un problema en las playas de estacionamiento porque cuando los conductores tienen que hacer maniobras muchas veces terminan dañando otros rodados, dijo Avignone al defender su proyecto.
Antes de empezar a aplicar la ordenanza, se deberá dar una amplia difusión a la norma, de forma tal que quienes tengan vehículos con estos elementos tengan tiempo de extraerlos.